viernes, 20 de julio de 2018

Expresar tu luz del alma

Expresar tu luz del alma

Jeshua: A través de Pamela Kribbe - 2012 

Traducido del inglés por Sandra Gusella


Queridos amigos:

Estoy aquí, estoy entre ustedes, soy Jeshua. Ustedes me conocen, yo soy su amigo y hermano.

Yo sé lo que es ser un ser humano, yo estoy muy cerca de ustedes en el corazón. Y todos ustedes están cerca uno de otros, porque todos ustedes presentes aquí o leyendo esto son almas que han venido a la Tierra una y otra vez inspirados por la Luz, por el deseo de cambiar la conciencia en la Tierra.

En lo profundo de su corazón ustedes aman mucho a la Tierra. Por supuesto que una parte de ustedes se ha decepcionado mucho. Ustedes han experimentado rechazo en sus vidas en la Tierra. Esto ha provocado dolor en sus corazones, pero ustedes han regresado, una y otra vez, y en este momento de la historia algo está sucediendo. Pueden sentirlo en ustedes mismos, en su propio cuerpo. Hay un movimiento en su alma; su alma se siente atraída a expresar realmente toda su luz. La conciencia en la Tierra ahora está lista para el cambio, y yo sé que todos ustedes quieren expresar su alma en esta vida en la Tierra. Yo alabo su coraje. Existe tanto una parte de luz como de oscuridad en ustedes. En la parte oscura pueden sentirse sin poder; se pueden sentir desanimados y quieren regresar al hogar. Pero yo les digo: ahora es el momento para realmente mostrar al mundo quiénes son ustedes. No se dejen impresionar mucho por el miedo y la agresión que hay en este mundo. ¡Ustedes son necesarios, ahora mismo!

¿Cómo se conectan con su alma y expresan su luz del alma? Todos ustedes tienen sentimientos, inspiraciones, deseos: ellos son el lenguaje de su alma. Cuando eran niños, muchos de ustedes tenían sueños y visiones de otra clase de realidad. Durante su crianza, les pueden haber dicho que no debían ser ingenuos, que debían ser realistas; se los desalentó a ser diferentes, a seguir un camino alternativo. Es por eso que es difícil ahora confiar en los sueños y visiones que tienen en su corazón. Sí, es tiempo de conectarse otra vez con el llamado de su corazón. Su alma les da mensajes todo el tiempo. Estos menajes vienen a través de sus emociones y a través de su cuerpo.

Por ejemplo, en el área del trabajo o en el área de las relaciones, con frecuencia sienten que no pueden expresarse verdaderamente o que su energía no es realmente apreciada. Ustedes son muy capaces de percibir, de sentir, si su energía es bien recibida o no. Sean honestos con ustedes mismos acerca de esto. Las emociones que ustedes sienten, que pueden haberse convertido en enfermedades físicas, son mensajes de su alma de que no se están honrando verdaderamente. Ustedes tienen miedo de soltar lo viejo, lo familiar. Sin embargo, su alma a menudo quiere guiarlos a ir más allá de lo familiar, hacia lo nuevo.

Ahora yo les pido que imaginen conmigo que hay un espacio abierto en su corazón. Pueden visualizarlo como un recipiente o vaso, y en él aún hay agua. Imaginen este lugar en su corazón, y vean como las flores están cayendo dentro de este recipiente o vaso, y observen las flores, sientan su energía…, ésta es su energía del alma. Recuerden cómo era ser un niño y sentirse completamente libre, libre de soñar y de concebir cualquier futuro que quisieran. Ahora maravíllense con la belleza de estas flores…, y tal vez reciban un mensaje de ellas, diciéndoles a cerca de hacia dónde quiere guiarlos la vida. Permitan que estas flores les hablen, y no tiene que ser en palabras; simplemente pueden sentir su energía.

Ahora una cosa es sentir la energía de su alma, como lo han hecho recién, y otra cosa es ponerla afuera en el mundo. Para hacerlo, ustedes tienen que recibir la energía de su alma no solo en su corazón y en su mente, sino también profundamente adentro, en su vientre. Lo que les sucede a veces es que sienten inspiración en su corazón, y empiezan a pensar y a trabajar acerca de eso: “¿cómo voy a poner esto afuera en el mundo?”, o ¿cómo puedo hacer para vivir de esto?”. Sus mentes comienzan a dispararse, pero el arte de recibir sus mensajes del alma es recibirlos completamente, lo cual significa hacia abajo dentro de su vientre. ¿Por qué esto es importante? El vientre contiene sus emociones más profundas. Para arraigar su inspiración del alma, ustedes tienen que permitir que la luz de su alma brille sobre las emociones más oscuras que son parte de ustedes. El área de su vientre alberga viejos miedos, los restos de profundo dolor emocional y tristeza, y ustedes tienen que atender esto para ser capaces de expresar su luz. Es sólo cuando se permite a su luz del alma brillar sobre su rincón más oscuro, que tiene lugar la liberación y la transformación interior.

Esta clase de transformación interior es la clave para atraer – en el nivel externo – el trabajo y las relaciones que resuenen con ustedes. Entonces para expresar su luz del alma en el mundo, ustedes necesitan fundirse plenamente con su alma, lo cual significa que ustedes permiten que su energía del alma vaya hacia abajo hacia su vientre. Éste es realmente el trabajo duro. Una cosa es sentir la inspiración en su corazón, un recuerdo claro de luz y unidad, pero otro paso es extenderse desde ese lugar de unidad hacia las partes de ustedes que se sienten muy solas y desalentadas. Cuando esto sucede, ustedes llegan a la conciencia Crística y sienten una profunda paz interior. La conciencia Crística llega tanto a la luz como a la oscuridad. Comprende la oscuridad desde adentro. No hay juicio, no hay lucha entre la luz y la oscuridad desde la perspectiva de la conciencia Crística. Hay una profunda aceptación de la vida tal cual es.

Para conectarse con sus partes más oscuras, véanlo como niños que necesitan ayuda. Desde el nivel del alma, ustedes son sus guías y sus padres, y es abrazando a su niño perdido que ustedes se vuelven completos. Así es como su alma llega a estar totalmente arraigada y presente en la Tierra. El modo del trabajador de la luz no es predicar acerca de un mundo mejor; no es tanto acerca de hacer algo de ningún modo. Es sobre volcarse al interior, en todos los niveles, y amarse y comprenderse verdaderamente. Cuando ustedes reciban el don del amor, automáticamente lo darán a los demás. Ustedes se habrán vuelto un trabajador de la luz incluso si no hacen nada específicamente con eso. Traerán cambios al mundo simplemente siendo ustedes mismos.

Yo los invito a establecer una conexión entre su parte más luminosa y su parte más oscura, más traumatizada. No piensen acerca de eso, solo siéntanlo. Véanse como un ángel, radiante con luz y amor incondicional. ¡Así es como ustedes en verdad son! Ahora vean a un pequeño niño aproximándose a este ángel. Este niño se siente solo y desolado. ¿Pueden recibirlo en sus brazos? El niño es una parte de ustedes y quiere volver a casa. Esto es lo que realmente es el trabajo de luz. Una vez que hacen las paces con ese niño, y lo abrazan, ustedes pueden sentirlo en su vientre: el niño les dará pasión y energía vital, y ustedes se volverán un ángel humano. Su luz del alma se expresará fácilmente en el mundo exterior y sin pensar demasiado, atraerán lo que resuena con ustedes en el área del trabajo y de las relaciones. Todas las cosas en el mundo exterior caerán en su lugar. Expresar su luz del alma comienza por dentro, y desde este trabajo interior todo lo demás fluirá sin esfuerzo.

<< Anterior                Inicio                Siguiente >>


© Pamela Kribbe 2005
Traducción: Sandra Gusella

miércoles, 18 de julio de 2018

El regreso de la mujer rebelde

El regreso de la mujer rebelde

María Magdalena: A través de Pamela Kribbe - 2012

Traducido del inglés por Sandra Gusella


Queridos amigos,

Los tres estamos presentes aquí hoy: Jeshua, María y María Magdalena. Nos sentimos honrados de estar aquí con ustedes. Nosotros los vemos como nuestros hermanos y hermanas. Somos uno en el corazón y para mí, Jeshua, es especialmente liberador estar aquí junto con mis amigas mujeres porque yo soy quien suele ser el representante de la energía Crística. Sin embargo, esa no es toda la verdad. En mi vida hubo mujeres a mi lado quienes fueron esenciales en mi misión. En aquellos tiempos no era aceptable que las mujeres hicieran lo que yo hice, ser un maestro público. Pero mi madre y María Magdalena ambas eran guerreras espirituales. Ellas me ayudaron a plantar las semillas de la conciencia Crística.

Hoy hablamos de las energías masculina y femenina. Mi compañera de alma femenina y yo hablamos en una sola voz. En su historia la energía femenina ha sido lastimada de un modo profundo. Esto ha tenido importantes consecuencias tanto para las mujeres como para los hombres en la Tierra. No son sólo las mujeres quienes has sufrido por el dominio masculino, los hombres también han sido heridos.

Primero discutiremos sobre la herida femenina. Les pedimos que imaginen a una persona femenina. Ella representa a la totalidad de la energía femenina. Ahora la energía femenina ha sido degradada y tratada con violencia. El efecto que esto ha tenido en las mujeres es que ellas se retiraron de la parte más baja del cuerpo donde reside su poder. Especialmente cuando ha habido violencia sexual, el trauma emocional hizo que las mujeres retiraran su conciencia de la parte más baja de su cuerpo. Se volvió difícil para ellas tener conciencia de ellas mismas y estar arraigadas. Imaginen a una mujer en frente de su tercer ojo. Ella representa la energía colectiva de las mujeres. En esta imagen ustedes pueden ver que hay una especie de hueco en el área del vientre. Ella ha quitado su conciencia de esta área y se siente insegura porque carece de cimientos. Dentro de su vientre ustedes pueden oír gritos de angustia y de dolor. Y quisiéramos invitarlos a todos ustedes, tanto hombres como mujeres, a irradiar luz hacia esta mujer, hacia su vientre. De este modo ustedes también se lo están dando a ustedes mismos.

Ahora quiere hablar María Magdalena.

Yo soy María Magdalena. Los amo profundamente. Siempre estoy con ustedes. Yo me he elevado sobre la herida femenina y ahora deseo tocar muy suavemente esta área de dolor para ayudar a las mujeres a sanar. Me gustaría verlas nacer otra vez con alegría y firmeza, de modo que el poder de lo femenino pueda regresar de un modo pacífico. Yo no deseo luchar o pelear. Vengo en paz y tengo un pedido especial para las mujeres. Todas ustedes han sido heridas en la historia, pero en este tiempo están recuperando su fuerza. Ésta es vuestra época, éste es vuestro momento. Quiero hacerles recordar que los hombres también necesitan ayuda. Ustedes como mujeres están familiarizadas con la llaga en vuestro vientre, el dolor y el trauma de ser degradada. ¿Pero qué les sucedió a los hombres?

Debido a las energías dominantes masculinas en el pasado y las energías de opresión y poder, los hombres fueron forzados a cerrar sus corazones. Ellos tenían que ser fuertes y duros, ésa era la imagen ideal de ser hombre. Pero de ese modo los hombres se volvieron alienados de su lado sensible. Muchos hombres se encerraron en sus cabezas; se volvió difícil para ellos expresar sus emociones y sus sentimientos. La incapacidad de conectar con su lado sensible, su parte femenina, también es una herida. Ustedes no viven la vida plenamente si no pueden acceder a sus sentimientos. De hecho, están desconectados de su alma. En muchos hombres hay un sentimiento de soledad y de alineación que puede ser percibido como un hueco en sus corazones.

Entonces ustedes ven: tanto hombres como mujeres han sido dañados en el pasado. La herida de las mujeres se localiza en el vientre, la herida de los hombres es como un hueco en sus corazones. Hoy quiero decirles a las mujeres que a medida que recuperan su poder, mientras reconocen su verdadera fuerza: lleguen a los hombres. Ellos necesitan su ayuda; ellos se han vuelto extraños, alienados del hogar. Tengan la ternura en sus corazones para ser compasivos con ellos. La Nueva Era sólo puede nacer si ambos hacen las paces. Si los hombres y las mujeres comprendieran sus heridas mutuas, ellos pueden construir un puente entre ambos.

Les pido a las mujeres que se unan a mí en enviar luz al hueco en su vientre. Desde esta luz se desarrolla un cordón que va directo dentro de la Tierra. Sientan su conexión con la madre Tierra como una mujer. Su energía femenina es tan poderosa y esencial para la vida. Recuerden su verdadera fuerza. Mientras sienten crecer su conciencia por ustedes mismas, lleguen a los hombres y envíen luz hacia el hueco en sus corazones.

Ustedes están en el borde de un nuevo tiempo en su historia. Se espera que se unan juntos como hombres y mujeres. Están invitados a tener alegría y risas otra vez como seres humanos. En muchos de ustedes yo veo guerreros cansados; han luchado y peleado y algunos de ustedes están muy cansados y decepcionados. La respuesta a su dolor yace en una vida muy simple. Por esto quiero decir: sentirse totalmente conectados a la Tierra otra vez y disfrutar de los placeres simples de ser un ser humano. Experimentar el amor entre hombres y mujeres, tener amistades con personas de ideas afines y vivir en paz con su entorno y con la naturaleza es la promesa de la nueva Tierra. 

En mi vida en la Tierra yo experimenté profundamente la herida femenina. Yo era una querida amiga de Jeshua. Podía sentir su fuerza y sabiduría, pero también sus penas y dudas. Hubo una comprensión íntima entre nosotros dos. Yo experimenté una profunda tristeza y dolor cuando él tuvo que dejar la Tierra, cuando fue asesinado. A menudo, cuando él nos hablaba, yo podía sentir sus mensajes no sólo en mi cabeza sino a través de todo mi cuerpo. Yo no quería argumentar acerca de sus ideas, acerca de sus mensajes, como lo hicieron sus discípulos. Con respecto a eso yo era un poco diferente a ellos. A veces ellos se burlaban de mí y por momentos yo me sentía sola. Era considerada como una “mujer rebelde”, era poco convencional. Ahora, realmente estoy contenta de ver ¡que las mujeres rebeldes son nuevamente bienvenidas en el mundo! Mucho ha cambiado desde los tiempos de Jeshua. 

Yo les digo: ¡las mujeres rebeldes serán las líderes del nuevo mundo! Las invito a todas a ponerse de pie en su verdadero poder. En el pasado, cuando las mujeres eran “rebeldes”, queriendo decir independientes, poco convencionales y apasionadas, a menudo eran calificadas de histéricas. En la Edad Media fueron llamadas brujas. Pero realmente, aquellas mujeres – yo era una de ellas – eran movidas por el amor. Ahora es nuevamente el tiempo para que las mujeres muestren su verdadero poder, no de una forma agresiva sino de un modo que reconcilie a las energías masculinas y femeninas.

¡Muchas gracias por estar aquí conmigo hoy!

<< Anterior                Inicio                Siguiente >>


© Pamela Kribbe 2005
Traducción: Sandra Gusella