martes, 17 de julio de 2018

El modo de obrar del Trabajador de la Luz

El modo de obrar del Trabajador de la Luz

Pamela canaliza a Jeshua - 2011

Traducido del inglés por Sandra Gusella

Queridos amigos,

Yo soy Jeshua. Hoy los saludo a todos ustedes y estoy estrechamente conectado a ustedes desde mi corazón. Estamos relacionados profundamente y hay un nivel en el cual somos uno. El uno, la conciencia íntegra que nos une puede sentirse como una energía de libertad, de creatividad, de bondad y de alegría. Este es vuestro verdadero origen y hogar. Ahora ustedes se han manifestado en una forma corporal localizada en el tiempo y en el espacio, pero ustedes son mucho más que eso. Yo ahora les pido que sientan esta conciencia enorme e ilimitada de la cual forman parte. Sientan a Dios adentro y sientan cuán simple es esta energía. Dios no está en la cima de alguna jerarquía mirándolos a ustedes hacia abajo. Dios es el flujo de energía que corre a través de todo: a través de ustedes, a través de todos los seres vivos de la Tierra e incluso a través de lo que parecen ser cosas inanimadas en vuestro entorno material. Dios está en todas partes.

Dios no está limitado por las formas. Dios es una conciencia pura, creativa, conectada con las formas materiales en el tiempo y en el espacio para experimentar la vida en una miríada de formas. Ahora sientan quiénes son ustedes en este gran flujo divino: una chispa de luz dentro de un océano de conciencia viva, pero una chispa indestructible que ofrece una contribución única a la totalidad. Sientan la fuerza indestructible dentro de ustedes, está ahí por siempre. Ustedes son parte de Dios.

Vuestra conciencia es divinamente creativa. Ustedes eligieron vuestro camino de vida y de experiencias. Aún cuando a menudo no lo sientan así siendo un humano, adentro en lo profundo hay una fuerza creativa en ustedes que diseña ciertos sucesos de cambio en vuestra vida y atrae ciertas experiencias que ustedes desean atravesar para comprender, crecer y expandirse. Esencialmente, ustedes nunca son una víctima de este mundo. En el centro de quienes ustedes son, nunca son impotentes o están devastados. Porque en ese centro está la chispa de Dios que dice “sí” a la experiencia por la que pasan estando en una forma corporal, y que sabe que ustedes son capaces de aprender de eso de modo que vuestra conciencia se vuelva incluso más amplia y más compasiva. 

Abracen este poder creativo interior, el cual atrajo a ustedes la vida que ahora experimentan. Abracen vuestra vida con todos los altos y bajos. Ustedes tienen el poder de vivirla bien. La satisfacción más grande que encontrarán será cuando recuerden quiénes son mientras están en una forma, arrebatados por las demandas y los desafíos de la vida en la Tierra.  Recordar quiénes son permite que la chispa de luz divina se conecte totalmente con vuestro ser humano. Rendirse a esta chispa interior de luz creativa, ilimitada cambiará vuestra vida y también cambiará las vidas de otras personas.

Ustedes quienes están leyendo esto, y quienes se sienten atraídos hacia la energía Crística, son algunos de los que anhelan hacer brillar su luz interior en el mundo. Ustedes añoran manifestarse como un trabajador de la luz, significando que ustedes sienten el deseo de esparcir luz y de elevar la conciencia en la Tierra. Vuestra pasión es pura y real; viene del centro de quienes son, de vuestra alma. Es la chipa de Dios dentro de ustedes la que los conduce hacia este deseo, porque es natural para Dios querer compartir la alegría, la luz y la compasión. Cada vez que se sienten felices en expresar quienes realmente son están sintiendo también la felicidad de Dios, ¡porque Dios y ustedes son uno en el corazón!

Ustedes a menudo se preguntan de qué se trata realmente el trabajo de luz. ¿Qué significa esparcir luz u ofrecer sanación a otras personas? Esa es la pregunta que me gustaría tratar hoy. Primero que todo, necesitamos echar una mirada más cercana a la relación entre las personas cuando uno está ayudando a otro. Quisiera señalar que algo extraño sucede con la distinción entre salud y enfermedad, o entre entero y quebrado, como se usa en vuestra sociedad. Cuando ustedes van al doctor porque tienen un problema médico, ustedes son una “persona enferma en necesidad de tratamiento”. Se supone que los doctores saben algo que ustedes no saben. Ellos son los expertos y ustedes fácilmente llegan a sentir que vuestra salud está en sus manos. No es muy diferente cuando sufren de problemas mentales o emocionales. Si las personas ven a un terapeuta, psicólogo o sanador, ellos silenciosamente presuponen que estos expertos tienen algún conocimiento o habilidad superior lo cual puede ayudarlos a resolver sus asuntos. Por el mismo modo en la que la relación entre paciente y doctor o cliente y terapeuta es definida, algo sucede en la propia percepción de ambas partes involucradas.

Al enmarcar esta relación en términos de uno teniendo más conocimiento y perspicacia que el otro, se sugiere que el cliente necesita al terapeuta/sanador/doctor para recibir algo que ellos mismos carecen y que no pueden darse a sí mismos. Se asume que el terapeuta está sano y entero, y ofrece luz y sanación al que está enfermo/o quebrado. Desde este punto de vista, el terapeuta o sanador está delante del paciente, y está en posesión de algo que ellos entregan al que está careciendo de este conocimiento o habilidad. 

Desde una perspectiva espiritual, este punto de vista es falso y distorsionado. Esto ya mismo los hace comenzar con el pie equivocado. Sin embargo, está profundamente engranado en vuestra sociedad, tanto en el cuidado de la salud física como mental. Fíjense cuán fácil es sentirse más pequeño que la persona a la que están visitando por un consejo médico o espiritual. Ustedes son los que tienen el problema; ellos son los que tienen la solución. Es una trampa tan común para las personas que diariamente ayudan a otros identificarse mucho con su rol de asistente, que ellos no pueden soltar ese rol. Ellos se definen a sí mismos con eso y esto los vuelve dependientes de sus clientes o pacientes, tanto como para la otra parte. El cliente puede sentir que necesita al asistente para curarse o sanarse, pero el asistente necesita al cliente también para sostener su imagen de ser el asistente: la persona inteligente y más grande que desea compartir sus logros con el que está en necesidad. Es fácil ahora que surjan relaciones desequilibradas, las cuales se centran en torno al poder y la dependencia.

El trabajo de luz es algo muy diferente. Para comprender de qué se trata realmente el trabajo de luz o la sanación espiritual, ustedes necesitan liberarse de la imagen tradicional de “terapeuta ayudando al cliente” o “doctor curando al paciente”. Ustedes necesitan soltar la verdadera idea de que ayudar tiene que ver con dar algo a algún otro. La verdadera idea de que la otra persona está careciendo de algo es perjudicial para su proceso de sanación. La verdad es que el único modo de ayudar a alguien es volverlos a ellos conscientes de su propio poder y habilidad para sanarse a ellos mismos. Es la marca de un buen maestro que ellos se hacen pequeños en lugar de grandes. Los verdaderos maestros los invitan a recuperar vuestro poder interior y ellos no compran la sugerencia de que ustedes son pequeños, necesitados y dependientes de alguien más. Los verdaderos maestros nunca se presentan como autoridades. Es algo tonto hacer eso. El verdadero don de un sanador es volver a la otra persona consciente de su propia autoridad interior, el hecho de que ellos son una chispa de Dios y que tienen disponible todo el conocimiento que necesitan.

La verdadera sanación es muy simple. No requiere métodos o conocimientos elaborados. Aquí estoy hablando de sanación para el alma. Por supuesto que los problemas físicos pueden necesitar ser atendidos por un experto médico que tiene habilidades y conocimientos muy específicos. Sin embargo, la sanación que afecta al alma es muy simple. Si ustedes van al centro raíz de los problemas mentales así también como físicos en las personas, de algún modo encontrarán la creencia de que ellos se sienten ineficaces, indignos, desagradables, solos y fracasados.

La causa raíz es que esas personas se sienten desconectadas de su verdadero ser, la chispa de luz divina que ellos realmente son. Ofrecer sanación a las personas es abrir su recuerdo del Hogar, recordarles su perfecta belleza, fuerza e inocencia.

¿Cómo hacen esto? Primero, no hay métodos o remedios establecidos. No es un procedimiento mecánico. Es una transmisión energética que puede ocurrir de muchas formas diferentes. Volveré a hablar de esto. Segundo, nadie sana a menos que ellos decidan abrirse a la sanación. Ustedes no pueden forzar la sanación sobre nadie. Es decisión de ellos. De hecho, la sanación tiene algo de milagroso: es el nacimiento de una nueva conciencia en el alma. Es su creación y no puede predecirse de antemano. En la vida de cada uno hay momentos en los cuales ustedes enfrentan la elección entre la luz y la oscuridad. La oscuridad representa rendirse al juicio y al odio hacia uno mismo, a los pensamientos negativos y al miedo. La luz representa abrirse a la bondad, al perdón, a la alegría y a la abundancia que es verdaderamente la marca de la divinidad. Es tarea de ustedes elegir. Incluso si el ángel más bello los está llamando para que liberen el pasado y entren al reino de Dios, significando que se funden otra vez con la chispa de Luz que son, es tarea de ustedes decidir. 

Si ustedes aún están inmersos en imágenes profundamente negativas de ustedes mismos o de otras personas, si están en la esclavitud del miedo y de la ira, ustedes incluso no notarán al ángel. En verdad, el ángel de la sanación siempre está cerca de ustedes. Es vuestro ser verdadero o superior, vuestra divinidad tratando de hacerles recordar quiénes son. A veces, en vuestras vidas, ustedes se encuentran con personas que por un tiempo juegan el rol de ángel sanador. Ellos pueden incluso no ser conscientes de ello, pero ellos les recuerdan a ustedes quiénes son realmente. Mientras ellos los escuchan o les hablan, de repente una chispa del ustedes real entra en vuestra conciencia y ustedes se sienten alegres e inspirados luego de haber estado con ellos. Esto los puede inspirar a elegir por la luz, a tomar decisiones en vuestra vida que sirven a vuestro ser superior, vuestra verdadera pasión y amor por la vida. La presencia del ángel puede actuar como un recordatorio, y puede ser la clave para cambiar vuestra vida, pero incluso entonces, es vuestra decisión confiar y dar el salto hacia la fe. ¡Sólo ustedes pueden hacer que suceda el milagro!

Ustedes pueden haber encontrado ángeles de sanación en vuestra vida y probablemente en varias ocasiones hayan sido un ángel de sanación para otros, incluso si no se dieron cuenta. Lo que quiero resaltar aquí es que de esto se trata el trabajo de luz. No tiene que ver con curar o componer a las personas, no se trata de ofrecer soluciones o sus problemas. No se trata de enseñarles ciertas habilidades o conocimiento o normas éticas. Todas estas acciones presuponen que a ellos les está faltando algo, que ellos son pequeños e indefensos. La sanación espiritual da vuelta esta imagen. Lo que ustedes le ofrecen a alguien más si quieren ofrecer sanación espiritual es realmente un cambio de percepción. En lugar de enfocarse en sus problemas, en sus asuntos y en sus sentimientos de incapacidad, ustedes se enfocan en su esencia, en su totalidad, en su radiante belleza. 

Si hay algo que dar por parte del sanador espiritual, es el don de la verdadera visión. Si ustedes son capaces de mirar más allá del dolor, de la ira, del miedo y del comportamiento autodestructivo de alguien, y ven el ángel de luz en su rostro, ustedes le ofrecen algo muy precioso. Al mirar su verdadera esencia, ustedes dulcemente la están invitando y la están llamando a que se haga presente. Percibir el verdadero poder y la luz interior de alguien más, incluso si no se muestran en la superficie, es como llamar a alguien por su verdadero nombre. Nada es tan poderoso como ser llamado por tu verdadero nombre.
Lo que yo hice cuando realicé los así llamados milagros de sanación en mi vida en la Tierra como Jesús, fue que entré en contacto con la esencia divina de alguien. Al ver y sentir la chispa de lo divino en alguien, se volvió consciente y fue su esencia divina la que realizó la sanación, no yo. Fue su propia remembranza lo que recuperó en ellos la salud mental e incluso física. Esos encuentros no siempre daban como resultado la sanación, porque siempre dependería de si la otra persona decidía abrirse a la sanación. El milagro estaba en ellos, y es importante recordar esto siempre que ustedes trabajen con personas con el propósito de la sanación espiritual.

Toda la sanación espiritual viene desde adentro. Como un trabajador de la luz ustedes no están sanando a nadie. Ustedes están creando el espacio de apertura, de estar sin juzgar, lo cual invita a la otra persona a mirarse con apertura y compasión. En lugar de tratar de resolver algún problema por fuera, ustedes se están conectando con el alma de la otra persona y están sosteniendo para ellos una visión de confianza y claridad. Este es el modo de obrar del trabajador de la luz. Ustedes están intentando devolverle a la otra persona su grandeza, en lugar de enfocarse en su pequeñez. Trabajar con alguien a nivel del alma significa que ustedes le muestran su responsabilidad por su propia vida. Debido a que ustedes hacen esto amorosamente y sin juzgar, esta responsabilidad no se sentirá como una carga. Se sentirá habilitante y liberador tomar responsabilidad. Al creer realmente en los poderes creativos de la otra persona, ustedes le reflejan su propia fuerza a través de vuestros ojos y palabras. Al enfocarse en lo que es completo e inmaculado en ellos, ustedes lo refuerzan.

Sólo pueden hacerlo así si ustedes realmente lo creen. Si en algún nivel ustedes dudan de que ellos puedan hacerlo, ustedes afirman su sensación de debilidad en lugar de invocar su fuerza. Son más poderosos como sanadores si ustedes confían completamente en la habilidad de la otra persona para resolver los problemas y liberar cualquier idea que ellos tengan de ser dependientes de ustedes. Muchos de ustedes sienten que devolver la responsabilidad a la gente de esta manera significa abandonarlos o decirles que resuelvan el asunto ellos mismos. Sin embargo, soltar todas las ataduras de dependencia no significa que ustedes ya no están ahí para ellos. Ustedes aún están ahí, sosteniendo su fe en su verdadera fuerza y poder interior, alentándolos a ir más allá de sus limitaciones autoimpuestas y ser todo lo que ellos pueden ser. Será elección de ellos qué hacer con el espacio de sanación que ustedes ofrecen.
Yo sé que muchos de ustedes pasan por un mal momento cuando ven sufrir a otras personas, especialmente si son seres queridos. Puede parecer imposible parar de “ayudarlos”, soltar y poner vuestra energía en otro lugar. Pero, por favor tómense un momento y consideren si realmente los están ayudando al mantenerse agarrados. Si ellos son dependientes de vuestra energía de bondad y apoyo para sentirse bien, ¿cómo harán para enfrentar su propia falta de bondad y apoyo hacia ellos mismos? A nivel del alma ustedes podrían estar reforzando su debilidad en lugar de despertar su verdadero poder interior. Esto los afecta negativamente a ambos.

Ser un trabajador de la luz o un sanador espiritual significa que ustedes buscan conectarse con alguien de alma a alma. A nivel del alma todos los seres son iguales y ninguno está por delante de algún otro. Todos ustedes son chispas del ser divino que ustedes llaman Dios. A nivel humano podría parecer que una persona es más inteligente, evolucionada o sabia que otra persona. Sin embargo, si ustedes lo observan desde la perspectiva del alma esta clase de juicio se vuelve obsoleto. Todas las almas están viajando a través del universo infinito y pasan por varios ciclos de experiencia y desarrollo. Podría ser que ustedes estén ayudando a alguien que está sufriendo un severo desequilibrio emocional debido a circunstancias muy difíciles que ellos encontraron en sus vidas. En este momento ustedes pueden ser el que ofrece asistencia. Pero más tarde, una vez que el que sufre ha recuperado su fuerza, ellos pueden volverse su maestro y mostrarles una profundidad de sabiduría y compasión que los deje asombrados.

Para ofrecer sanación espiritual o ser un trabajador de la luz es importante recordar siempre que a nivel del alma son iguales a la otra persona. Es esencial que ustedes reconozcan vuestra propia calidad de humano y que realmente están en el mismo bote que la otra persona. Pueden estar sosteniendo un espacio de luz y compasión para alguien, pero eso no los hace a ustedes diferentes de ellos, en el sentido de “ser superior” o “estar por encima” de ellos. No se identifiquen con ser un trabajador de la luz. Si se sienten atraídos a ayudar a las personas a descubrir su verdadero poder interior, sigan vuestra pasión y hagan lo que aman hacer. El trabajo de luz puede tomar toda clase de forma; ciertamente que no está limitado al ofrecimiento de terapia. 

Generalmente, si ustedes hacen lo que realmente aman hacer verán que inspiran a otros a hacer lo mismo. Ser uno con la chispa de Dios que está en vuestro corazón naturalmente los conducirá al tipo de trabajo, o relación, o lugar donde vivir adecuado. Vivir desde el corazón es realmente muy simple. Se trata de conectarse con vuestro deseo del corazón, con vuestra verdadera alegría, y de atreverse a actuar de acuerdo a ello. Hacer esto los hará un trabajador de la luz y no necesariamente porque están “ayudando a otras personas”. Es porque ustedes están trayendo al mundo vuestra canción original del alma que inspirarán a otras personas a que también crean en ellos mismos y a que saquen a relucir lo mejor de ellos. La luz naturalmente irradia hacia afuera. Ustedes no tienen que enfocarse en la pregunta de cómo esparcir luz en el mundo. No traten de ser buenos y útiles. Traten de vivir de acuerdo a vuestra propia naturaleza original y divina, y el mundo será un mejor lugar debido a eso.

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© Pamela Kribbe 2005
Traducción: Sandra Gusella

lunes, 16 de julio de 2018

Rendición y Control

Rendición y Control

Jeshua: A través de Pamela Kribbe

Traducción del inglés al español por Sandra Gusella, Marzo de 2007

Queridos amigos,

Les hablo desde el corazón de la conciencia Crística. Yo soy Jeshua, pero yo no soy solamente una personalidad particular quien vivió en la Tierra dos mil años atrás. Aquí, yo represento más que eso. Yo represento la energía Crística que vive y vibra en todos sus corazones. Así, el que habla aquí ahora también representa su propia energía y vibración; es su propio anhelo sincero lo que se vuelca en palabras en esta habitación donde estamos sentados.

Estar juntos de este modo no significa simplemente dictar una conferencia…. Es un encuentro y una celebración de la Nueva Era. El despertar de una nueva conciencia parece estar muy lejos a veces. Parece haber mucha disonancia y conflicto en su mundo y, en verdad, dentro de ustedes mismos también. Pero aún así el despertar ha comenzado. Una nueva dimensión de conciencia está naciendo en la Tierra ahora mismo, y luego de una larga etapa de preparación gradualmente encontrará apoyo y esparcirá una ola de esclarecimiento a través de la Tierra. Todos ustedes forman parte de esta ola de conciencia recién despertando, absorbiendo a la Tierra en este momento. En muchos sentidos, ustedes son esa ola de energía.

“Rendición y control” es un gran tema dentro de este proceso de despertar espiritual, tanto a nivel individual como a nivel colectivo. A nivel político, los líderes mundiales a menudo se hallan enfrentados con este tema. Aún es muy difícil estar a cargo políticamente y tomar decisiones desde el corazón. La política aún no parece estar preparada para esto. No obstante, rendirse a la sabiduría del corazón es la única salida para los grandes conflictos en la Tierra en este momento, la única posibilidad de una resolución pacífica de estos conflictos.

El sentido universal de conexión y unidad que es posible entre personas de razas, religiones y culturas muy diferentes, es el cimiento para la paz mundial. El reconocimiento entre sí como seres humanos, a pesar de las disimilitudes externas, está creciendo entre la población mundial, y es parcialmente estimulado por su tecnología de la información moderna, la cual disminuye enormemente las distancias en tiempo y espacio. Al mismo tiempo, el crecimiento hacia el entendimiento mutuo es amenazado por viejos conceptos basados en el miedo acerca de “nosotros” y “ellos”. Pensar en términos de bueno y malo, correcto e incorrecto, “nosotros” y “ellos”, perpetúa antiguas hostilidades y echa leña a una gran cantidad de agitación emocional. Estos conceptos divisivos aún son utilizados por los políticos para sostener su poder.

Sin embargo, quienes finalmente determinan la realidad a nivel político son ustedes, el individuo. La política refleja la conciencia de la mayoría de los individuos en conjunto. Es por el conocimiento de muchos individuos independientes en conjunto que cobra vida un nuevo nivel de conciencia. Más que extenderme en el nivel político, me gustaría ahora hablar sobre el nivel individual, el cual todos ustedes están trabajando para integrar la energía del corazón dentro de sus vidas y el cual ustedes están tratando con el tema de rendición y control.

Mientras tanto les pido que simplemente sientan la energía de rendición, ya que está reunida aquí hoy y fluye desde sus corazones. Todos ustedes imploran enfáticamente por la sensación de liberación y confianza que es inherente a rendirse, soltarse. Pero a menudo, ustedes aún no saben cómo integrar esta energía en el día a día de sus vidas.

¿Cuál es el origen del control en la vida? Por control yo quiero decir: querer ejercer poder sobre la vida, forzarla a fluir de acuerdo a sus deseos, los cuales ustedes perciben como correctos y justos. ¿Por qué ustedes intentan ejercer control sobre sus vidas, y viven continuamente con tensión y ansiedad debido a esto? El origen del control es el miedo. El miedo está profundamente engranado en la estructura de sus vidas: su crianza, su educación y su sociedad. Los mecanismos de control están presentes por todos lados y les son enseñados como buenos hábitos. Aparentemente, ustedes son una persona inteligente, racional, si quieren tener control sobre su vida y organizarla acordemente.

La rendición y lo impredecible infunden en ustedes una sensación de temor. Ustedes asocian rendirse con darse por vencido, con no saber qué hacer, con ser abrumado por la agitación o la crisis emocional. Esto, sin embargo, es una concepción muy limitada de rendición. Es una concepción nacida del temor, de la conciencia basada en el ego. Hay nociones mucho más positivas de rendición, una que apunta a un estilo de vida, una forma de ser, en la cual ustedes viven confiados, sin la necesidad de controlarla, forzarla o manipularla.

El ego implora el control porque está atemorizado. El ego se identifica con imágenes que no vienen del alma, sino que son alimentadas por el mundo externo. El ego está corriendo alrededor constantemente para preservar su propia imagen, ser un hombre de negocios exitoso, una cuidadosa ama de casa, o un terapeuta competente. Quiere mantener esta imagen para tener control sobre lo que las personas piensan de él. Sin embargo, siempre hay momentos en el que el ego falla y pierde. Este puede ser el caso cuando ustedes se sienten agotados, enfermos o sus relaciones se desbaratan. El ego considera estas crisis, las cuales en cierto punto los fuerza a soltar y a rendirse, como golpes mortales.

Así el ego asocia la rendición con la crisis. El ego vive en una continua alternancia entre el control y la crisis. A menudo, en momentos de verdadera crisis en su vida, ustedes son invitados a mirar el tesoro oculto dentro de él. Siempre hay un elemento positivo escondido dentro de la crisis, el cual les hace señas para que lleguen más cerca de su propio corazón. De ese modo, la vida siempre los está moviendo más cerca de ustedes mismos, de su conocimiento y de su sabiduría interior, incluso si viven de acuerdo a los dictados del ego. Porque siempre habrá situaciones en su vida que tarde o temprano los desafiarán a rendirse. La vida siempre les está ofreciendo oportunidades para elegir la rendición como forma de vida.

Ustedes conocen esto. Todos ustedes conocen estos momentos de rendición después de una crisis, preciosos momentos de claridad y conciencia, en los cuales se dan cuenta de que son conducidos por el flujo de un invisible hálito divino. Ustedes comprenden que este flujo divino de vida quiere lo mejor para ustedes, y que pueden confiar en él incluso si no les trae necesariamente lo que ustedes esperaban. Lo que todos ustedes anhelan es vivir más permanentemente de acuerdo a esta conciencia superior; incorporar este modo de ser en su vida diaria, sin tener que ser empujado a esto por profundas crisis y desesperación. Todos ustedes desean la rendición como estilo de vida.

Todos ustedes son guerreros cansados. Han recorrido un largo viaje. A veces se sienten muy viejos y cansados por dentro, pero es mejor decir que ustedes están muy cansados de lo viejo……. Están en la búsqueda de un modo de ser que no exige esfuerzos –inspirante y aún así liviano y fluido. La clave es que ustedes no se vacíen en sus relaciones, en sus trabajos u otros objetivos, hasta que se hagan pedazos y la crisis los fuerce a rendirse. Den un paso más adelante, o mejor dicho den un paso atrás, y enfóquense en una forma de vida que se caracterice siempre por soltar, confiar y rendirse. Rendirse significa: no luchar, no resistirse sino acompañar el flujo de la vida, confiando en que la vida les ofrecerá precisamente lo que ustedes necesitan. Confíen en que sus necesidades son tenidas en cuenta y serán satisfechas. Acepten lo que está en su vida ahora mismo y estén presentes en eso. Acerca de esta forma de vida deseo hablar, ya que ustedes anhelan esto de un modo profundo y sincero. Es un deseo espiritual que viene de su alma, el flujo divino dentro de ustedes.

Obstáculos en el camino a rendirse: tres falsos dioses


Por un lado, ustedes desean suprimir sus máscaras y vivir abiertamente de acuerdo al modelo original de su alma. Ustedes anhelan la sinceridad, la honestidad, el amor y la conexión. Por otro lado, bajar esas máscaras es un asunto muy difícil para ustedes. Han sido criados con creencias y estructuras que han llegado a arraigarse en sus psiquis y que les impiden conectarse con su propia alma.  En particular, me gustaría dirigirme a tres ídolos o “falsos dioses” hacia los que ustedes frecuentemente se vuelcan para obtener guía, pero los cuales de hecho los ponen a ustedes fuera de su centro, fuera del equilibrio necesario para vivir en rendición a quienes ustedes realmente son.

1.  El primer ídolo: Dios como una autoridad fuera de ustedes

El primer dios falso es Dios mismo, es decir Dios concebido como el amo y maestro de la creación. Ese tipo de Dios es una construcción humana, una imagen de Dios que ha influenciado profundamente su cultura.

Muchos de ustedes piensan que tienen que soltar esta imagen tradicional de Dios. Ustedes dicen que no creen más en un Dios crítico y castigador, quien se yergue elevado sobre ustedes y quien lleva un registro de sus éxitos y fallas como un maestro de escuela. Ustedes dicen que creen en un Dios de Amor, quien los perdona todo el tiempo y quien los aprecia y los anima. Sin embargo, en el modo rígido y desamorado con el que a menudo ustedes se tratan a ustedes mismos, ¡este viejo Dios aún está muy vivo! ¿No se dicen a menudo que han fallado, que no hacen lo correcto, que deberían haber progresado más allá, ya sea en el área de las relaciones, del trabajo, o en lo espiritual? Ustedes se torturan con ideas como: yo no cumplo con las expectativas de Dios, yo estoy desilusionando a mis guías espirituales o Ser superior, he fallado en mi misión, yo no estoy contribuyendo en nada significativo para el mundo.

Muchos de ustedes creen, secretamente como quien dice, que hay un orden superior al cual se supone que ustedes tienen que responder u obedecer. Ya sea una “misión del alma” o un “camino de vida” que ha sido tendido para ustedes, una jerarquía espiritual que tiene un “encargo” para ustedes, o un guía espiritual que les dice qué hacer o dónde ir…… en todos esos casos ustedes creen en la existencia de una autoridad superior, un nivel espiritual por encima de ustedes, al que sería mejor que escucharan. Pero tan pronto como ustedes creen en una autoridad fuera de ustedes, quien es capaz de ofrecer pautas acerca de qué es lo que deberían hacer en su vida, estamos atrás con el Dios tradicional. De acuerdo con esta imagen hay un nivel de verdad en el cual las cosas son fijas y determinadas, y todo lo que ustedes pueden hacer es vivir o no conforme a eso. Esta es una falsa imagen.

Ciertamente, cuando ustedes nacen, en su alma hay intenciones para la vida que viene. Uno podría llamar a éstas su propósito superior para esta vida, pero no ha sido ordenado por nada fuera de ustedes. Son ustedes, ustedes mismos, quienes lo han elegido y nació de sus propios deseos y anhelos. Las cosas que son “predeterminadas” en su vida – en el sentido de que es muy probable que sucedan, nunca nada está completamente asegurado – han sido creadas y elegidas por ustedes. Ustedes se pueden conectar con su propósito de vida o inspiración superior al escuchar sus sentimientos, la voz de su corazón, sus más profundos anhelos. Quisiera aconsejarles que no escuchen demasiado las doctrinas espirituales estrictas sobre cómo deberían ustedes vivir. Escuchen especialmente la así llamada parte más baja de ustedes: las poderosas emociones que se manifiestan en su vida diaria. A través de estas emociones el alma está tratando de llegar hasta ustedes y decirles algo.

Si ustedes quisieran saber qué es lo que su alma quiere decirles en este momento, miren las emociones que a menudo se reiteran en su vida y que más los absorben. Mírenlas de un modo bondadoso pero honesto. No acusen a nadie más por sus emociones, no presten atención a causas fuera de ustedes; mírenlas como el resultado de sus elecciones. Por ejemplo, si con frecuencia ustedes están enojados y molestos, ¿de dónde viene eso? ¿Hay algo que les falta? ¿Qué les dice la ira? ¿Cuál es el mensaje escondido adentro? ¿Es una sensación de no ser reconocido y valorado por los demás? ¿Tienen miedo de mostrarles a ellos quiénes son ustedes, miedo de defender su verdad? ¿Ustedes con frecuencia esconden sus verdaderos sentimientos y es difícil para ustedes establecer claramente sus límites? A menudo, a través de la ira, un mensaje sincero les está gritando: un deseo de ser quienes ustedes son, de mostrar al mundo su energía original del alma. Si ustedes reconocen su anhelo del alma a través de la ira, están viendo su ser angelical brillando a través de su niño interior. 

El ángel dentro de ustedes es el “ser superior” quien quiere conectarse con la realidad física, encarnar y hacer brillar su luz sobre la realidad de la Tierra. Es la parte que sabe. Su niño interior es la pasión de la vida misma: es deseo, emoción y creatividad. Es la parte que experimenta. Su niño interior es su “ser inferior”. El niño interior es una fuente de alegría y de creatividad si vive en armonía con el ángel interior. Pero si se aparta de las caricias del ángel y queda a la deriva, es una fuente de emociones corriendo salvajemente. La ira se convertirá en odio y venganza. El miedo se pervertirá en defensa, neurosis y frustración. La tristeza se degenerará en depresión y amargura. Las emociones originales son indicadores… mensajes de la parte de ustedes que experimenta. Es el niño quien, a través de estas emociones, extiende sus manos hacia el ángel dentro de ustedes. Las emociones expresan la experiencia pura, sin conocimiento.

Ellas son expresiones de incomprensión. Es en la conexión con el ángel que las emociones pueden ser tomadas como indicadores y ser comprendidas. Como tales, las emociones se vuelven instrumentos para la transformación y la exploración: el “ser inferior” enriquece y complementa al ser superior ya que provee a la parte que sabe de contenido sentido.  El ángel en ustedes cobra vida y experimenta profunda alegría si se le permite iluminar al niño. Y si el ser superior brilla a través de él de este modo, su cuerpo emocional se calma y obtiene equilibrio. El fruto del confluir del ángel y del niño es un conocimiento interior intuitivo que puede imbuir sus vidas con luz y facilidad.

Los principios superior e inferior en ustedes, el ángel y el niño, son un todo orgánico, significativo. Los conceptos “superior” e “inferior” por lo tanto no son realmente correctos. Se trata de un jugar alegre entre la “sabiduría” y la “experiencia” juntas. Es esta interacción lo que conduce a la sabiduría verdadera, encarnada (como opuesto de teórica).

Para hallar pautas respecto a su vida en el momento del ahora, ustedes pueden dirigirse lo más que puedan a su niño interior. Dándole la atención que él necesita, ustedes lo bañan con su conciencia superior, el toque del ángel. Para ilustrar esto, volvamos al ejemplo anterior en el que hablé de ira y de irritación. Una vez que se han conectado con esta emoción y la han concebido como un niño, ustedes pueden invitar al niño a venir hacia ustedes. Ustedes pueden preguntarle qué es lo que lo perturba y qué necesita de ustedes para sanarse. Dejen que el niño les responda y permítanle expresarse muy claramente. Imagínenlo hablándoles de un modo vivaz, con una expresión concreta en su cara y un lenguaje corporal claro. Tal vez les esté dando respuestas específicas, tales como “¡yo quiero que renuncies a tu trabajo!” o “yo quiero tomar lecciones de danza”, o pueden ser más generales como “yo necesito jugar y relajarme más” o “¡yo no puedo estar lindo todo el tiempo, tú sabes!” Tomen las respuestas seriamente y vivan conforme a eso tanto como puedan. Tal vez ustedes no puedan hacer instantáneamente las cosas que su niño interior desea. Pero pueden empezar de a poco y paso a paso comenzar a darse cuenta de sus anhelos.

Si abrazan al niño enojado, atemorizado o triste dentro de ustedes con amor y aceptación, es tocado por el ángel que está dentro de ustedes y el resultado es que su alma les habla a ustedes. Comiencen con las emociones, encuentren el verdadero anhelo detrás de aquellas emociones, y hallen un camino para comprenderlas paso a paso.

En la imagen del ángel y del niño interior que yo estoy delineando, no hay lugar para una figura autoritaria de Dios. Lo “superior” y lo “inferior” se complementan uno con otro en una relación abierta, de desarrollo dinámico. El ángel no le dicta nada al niño, ni el niño tiene autoridad sobre el ángel. Es en su interacción que ustedes descubren lo que es correcto para ustedes en este momento.

Ustedes encontrarán sus propósitos de vida a través de esta conexión íntima entre el ángel y el niño. En esta conexión ustedes descubren lo que realmente los impulsa. Ninguna autoridad fuera de ustedes puede reemplazar esta conexión, o hacer la conexión por ustedes. Un maestro sólo puede señalar esa área sagrada interior, donde ustedes pueden permitir que el niño interior sea acariciado e inspirado por el ángel en ustedes. En esta área ustedes descubren quiénes son y cuál es su pasión. Las pautas generales acerca de cómo vivir una vida espiritual casi siempre son inadecuadas, o al menos no son de naturaleza universal. La verdad es amorfa. Cada criatura tiene su propia forma, su propio modo de vivir la Verdad. Ese es el milagro de su esencia del alma original. Los maestros espirituales genuinos no enseñan hacer y no hacer específicos, tales como “no comer carne” o “meditar dos horas por día”. Un verdadero maestro sabe que todo se trata de hallar su propia verdad, en profunda comunicación con ustedes mismos.  Los maestros pueden indicar qué es lo que a ellos le ha sido útil o su propio modo, pero ellos no convertirán esto en una regla o dogma.

Si ustedes echan una mirada al modo en que Dios ha sido retratado en la mayoría de sus tradiciones religiosas, esto es exactamente lo que sucede aquí. La mayoría son tradiciones de miedo y de abuso de poder. La necesidad de reglas talladas y dogmas y la tendencia hacia las organizaciones jerárquicas siempre muestran que el miedo y el poder están en juego. Sin embargo, lo mismo también sucede en la espiritualidad de la nueva era. Tomen por ejemplo las muchas predicciones y teorías especulativas que están circulando actualmente. Si aceptan esto sin consultar su propia base de sentimientos relacionados con eso, ustedes pueden volverse inseguros y comenzar a preguntarse “¿estoy haciendo las cosas bien?”, “¿qué pasa si pierdo la nave (o nave espacial…) en el 2012?” o “¿está el estado de mis chakras lo suficientemente puro como para entrar a la 5ta dimensión?” Este tipo de preguntas ciertamente no es útil para su crecimiento interior. 

Yo les pido: vuélquense hacia ustedes mismos. No se enfoquen en el movimiento de los planetas o estrellas, los cambios climáticos, o el juicio de un “maestro ascendido” para determinar el nivel de su propia comprensión. Ustedes son el centro de su universo, el estándar y la piedra de toque de su mundo. No hay Dios fuera de ustedes quien sepa más o quien determine las cosas por ustedes. No sólo que el Dios que ustedes anteriormente proyectaron fuera de ustedes reside en ustedes, sino que este Dios tampoco es omnisciente. El principio divino en ustedes y toda la creación es una fuerza juguetona, creciendo y evolucionando de manera abierta e impredecible.

En esta imagen, lo “inferior” tiene una indudable razón para existir: es el combustible para el crecimiento y la satisfacción. La luz y la oscuridad tienen su propio rol que jugar y es en la aceptación de ambos que ustedes se iluminan. Extenderse en la luz de un modo desproporcionado, ignorando o combatiendo la oscuridad, lo cual aspiran ciertos grupos espirituales, crea desequilibrio y una resistencia sutil a (y desprecio por) la vida en la Tierra.

Hacer las cosas mal, cometer errores, todo es correcto y puede incluso traerles mayor crecimiento que tratar de evitar las equivocaciones. En las “cosas malas” la semilla de la luz está latente. Sólo experimentando lo malo desde adentro, ustedes pueden experimentar lo bueno como hermoso, puro y verdadero. Ustedes no pueden aprender “desde afuera”. Ustedes, el Dios dentro de ustedes, se ha sumergido a las profundidades (dentro de la realidad material) para volverse sabio a través de la experiencia, no para aplicar sabiduría a la experiencia. En ese sentido, no muchas cosas son no-espirituales. Toda experiencia es sagrada y significativa. No se dejen guiar por normas externas, que dictan lo que es saludable, correcto y espiritual para ustedes hacer. La piedra de toque está en su propio corazón: si ustedes lo sienten correcto, entonces está bien. Suelten cualquier otra cosa. 

2. El segundo ídolo: los estándares e ideales de la sociedad

Otro dios falso que los separa de su energía de alma original es la “sociedad”: los estándares y valores que controlan su mundo social y son transmitidos a ustedes a través de su crianza, educación y ambiente de trabajo. Muchos de los ideales de la sociedad tienen sus raíces en el miedo, en la necesidad de controlar y estructurar la vida de modo que llegue a ser un campo de juego hábilmente dispuesto. Muchas pautas de comportamiento no están muy inspiradas en lo que la gente verdaderamente siente y experimenta, sino en lo que parece desde afuera.

Tratar de cumplir con tales estándares externos de conducta puede poner mucha presión sobre ustedes. Piensen en el miedo a “no encajar en”, no haber logrado lo suficiente, no ser lo suficientemente bello, no tener relaciones, etcétera. Al compararse con imágenes irreales de éxito y de felicidad, su energía creativa se atasca y ustedes ya no se sienten más en casa en este mundo.

Debido a todos estos hacer y no hacer, los cuales se han vuelto como una segunda piel, ustedes difícilmente se atreven a explorar su creatividad original. Tienen miedo de salirse de la senda pisada. Pero es exactamente esta fuente original de energía, la energía que quiere fluir originalmente desde ustedes, ¡la que es tan bienvenida en la Tierra! Es esta parte de ustedes la que está destinada a causar la transformación de la conciencia en la Tierra en este momento.

Conectarse con sus impulsos creativos y expresarlos a su propio modo original a menudo exige que ustedes se desvíen de los propósitos e ideales de la sociedad. Puede ser el caso que su ritmo natural de explorarse y luego expresar quiénes son ustedes en el nivel material, no encaje con el esquema de la sociedad de cómo y cuándo lograr ciertas cosas en la vida. Ustedes pueden tener que atravesar primero un largo proceso de llegar a conocerse profundamente, no logrando o produciendo nada en el nivel externo. Mientras esto puede parecer ineficiente o fracasado para la gente, ustedes pueden estar trabajando muy duro en el nivel interior, descubriendo muchas cosas valiosas acerca de ustedes mismos. Tómense su tiempo para descubrir quiénes son, dónde los conduce su energía natural, e integrarla dentro de su ser emocional y físico. No presten atención al éxito externo. Enfóquense en lo que se siente bueno y correcto para ustedes, lo que los hace sentir relajados e inspirados. Si ustedes encuentran ese modo de vivir, y experimentan paz y sosiego por dentro, ustedes entrarán más fácilmente en contacto con su energía del alma original.

Hay mucho miedo en la gente respecto a lo que la sociedad dicta y espera de ustedes. Lo extraño es que esa “sociedad” como tal ni siquiera existe. Lo que tenemos es una gran cantidad de personas juntas, cada una con sus propios anhelos sinceros y sus miedos profundamente arraigados. Cada uno desea ser libre en el sentido más profundo de la palabra: simplemente ser quien ellos son sin miedo a ser juzgados por “los demás”. Por lo tanto, piensen otra vez, siempre que estén prestando mucha atención a lo que los demás piensas de ustedes. De hecho, ustedes también se están volviendo el peor enemigo de los otros, ya que aceptando sus pautas y temiendo su crítica, ustedes mantienen vivos los falsos ideales y se sofocan ambos incluso más intensamente. Ustedes resultan ser la “sociedad” de alguien más.

Especialmente ustedes, quienes son los pioneros de la Nueva Era, pueden ser un ejemplo para la gente que está atrapada en el miedo. Ustedes son ese ejemplo cuando verdaderamente se mantienen parados por sí mismos, escuchan atentamente sus sentimientos, viven en conformidad y sueltan los dictámenes externos. Estas opiniones nacen del miedo, no del amor, y a menudo están basadas en viejas reglas y códigos de los cuales nadie recuerda su verdadero origen. Estos viejos estándares, que ya no mantienen conexión con el corazón humano, esperan ser transformados desde adentro, por personas que se atreven a dar a conocer nuevas perspectivas. La sociedad los está esperando; espera ideales y estándares inspirados que ayuden a las personas a conectarse con sus corazones y con sus verdaderos deseos. Ustedes contribuyen a la transformación colectiva de la conciencia siendo un ejemplo de amor en lugar de un seguidor del miedo.

Atrévanse a incitar a su parte juguetona, infantil. Entren en contacto frecuentemente con su niño interior: él sabe muy bien lo que quiere. A menudo ustedes difícilmente pueden sentir qué es lo que su corazón verdaderamente anhela y ustedes sienten como si hubieran perdido su pasión. Esto sucede porque ustedes no le permiten más a su niño interior jugar, fantasear y soñar. Cuando ustedes se miden a partir de códigos externos (lo que es apropiado para mi edad, género, ambiente social) ustedes se limitan y no permiten al niño, al soñador y visionario, ponerlos a ustedes fuera de esos límites y conectarlos con su “código interior”.

Todos ustedes nacieron con una inspiración, un deseo de manifestar algo en la Tierra, tanto para ustedes como para los demás (“sociedad”). Ustedes no han venido aquí para vivir en la torre de marfil. Ustedes son parte de la conciencia colectiva en la Tierra y han venido aquí para ser un líder y un inspirador de cambio. Eso es lo que los hará sentirse felices y realizados. Al conectarse con su niño interior, y sentir una vez más la magia de esa pasión original, las fronteras ilusorias y los límites serán levantados y ustedes hallarán su camino en la vida de un modo mucho más fácil y ligero. Cuanto más se liberen de los falsos dioses que los mantienen pequeños y temerosos, más vivirán desde una sensación de libertad y de rendición al corazón, y más el universo los apoyará y les proveerá los medios necesarios para dar fruto a su pasión.

3. El tercer ídolo: compadecer a los demás y acompañar su sufrimiento

Hay otro dios falso que quisiera mencionar y el cual tal vez sea el que más los preocupa en la vida diaria. Es compadecer a sus compañeros, compartir la carga con sus seres queridos sufriendo junto con ellos. Ahora, ustedes pueden preguntar: ¿Cómo puede ser eso un ídolo? ¿No se supone que estoy conectado con los demás, especialmente con mis seres queridos, y que tengo que ayudarles si puedo? De lo que estoy hablando es de una tendencia que tienen ustedes a conectarse tan profundamente con la gente que tienen a su alrededor, que son arrastrados hacia su dolor, sus problemas y emociones negativas y pierden contacto con su propio centro y paz interior. Esta clase de lástima y co-sufrimiento no es su deber, no es provechoso para la otra persona y no es correcto desde un punto de vista espiritual.

Mucho de lo que ustedes llaman “elevada sensibilidad” se está abriendo tanto hacia la energía de la otra persona que quita las suyas. Su empatía (es decir, la habilidad de sentir el humor y las emociones de la gente) en ese caso está insuficientemente equilibrada por la perspicacia de que las energías negativas en esa persona pertenecen a ellos y no a ustedes. Ustedes no están comprendiendo con suficiente claridad que esa negatividad juega un rol viable en la vida de la otra persona y que ustedes pueden iluminarlos a través de su compasión y comprensión, pero no sirve al propósito de nadie si ustedes sufren junto con ellos.

Por supuesto que a ustedes les encantaría ver a sus seres queridos llevar vidas felices y satisfactorias (ya sean su esposa, su hijo, su padre o un amigo). Ustedes quisieran que ellos se sintieran mejor y que sus problemas fuesen resueltos. Siempre recuerden que los problemas que ellos tienen son sus propias creaciones. Los problemas de relaciones, asunto de dinero, problemas de salud, desórdenes psicológicos…. Todos ellos reflejan conflictos internos profundamente arraigados dentro de su alma. En algún lugar en lo profundo la gente quiere experimentar estos problemas, para librarse de algo. Podría parecer que ellos son víctimas, especialmente cuando ellos corren en círculos una y otra y vez. Pero a menudo eso significa que ellos aún quieren experimentar completamente algunos aspectos de ese problema y que ellos aún no están abiertos a su ayuda. Si de todos modos tratan de ayudarlos, ustedes fácilmente se tornarán molestos y controladores y agotarán sus propias fuentes de energía. Entonces entréguense a la rendición como forma de vida.

Dando demasiado o inapropiadamente, ustedes malgastan su energía y se encadenan emocionalmente con aquél que están ayudando. Esto los hace dependientes de la otra persona para su sensación de bienestar. Sus energías emocionales se confunden y ésta es una de las mayores causas de la pérdida de fuerza, vitalidad y conocimiento de uno mismo. Pocas cosas pueden descomponer su energía tan fácilmente como la sensación persistente de deber, culpa y responsabilidad por alguien más.

En tal “relación de ayuda” a menudo surgen asuntos de poder, incluso si ninguno tuvo esa intención. Al dar demasiado o inapropiadamente, el ayudante en realidad trata de disimular un vacío interior que pasa desapercibido mientras uno está preocupado por alguien más. Ayudar a alguien más puede hacerlos sentir más fuerte y más seguro de sí mismos. Aquél que recibe toda la atención por parte de ustedes, experimenta esto como lindo y confortable, y ellos pronto notan que pueden influenciarlos con sus estados de ánimo y emociones. Ellos saben que si las cosas se ponen peor para ellos, ellos consiguen más atención de ustedes (porque ustedes desean muchísimo que ellos estén bien). El “sufriente” entonces percibe que tiene poder sobre ustedes y eso da como resultado el permanecer en el rol de víctima. 

En tal relación, está teniendo lugar un fuerte intercambio de energía, y los agotará a ambos, porque no está alineado con lo que sus almas realmente quieren. No hay una verdad espiritual en el modo en el que ustedes se están reduciendo uno al otro a roles muy limitantes. El ayudante finalmente se frustrará porque el sufriente no progresará demasiado: no tiene interés en cambiar, porque él ha invertido en el rol de víctima. Y el sufriente se atasca incluso más en su rol de víctima; ellos se hunden en eso más profundamente, lo cual puede paralizarlos completamente. Ambos se enojarán y se culparán uno con otro.

Ustedes fácilmente se compadecen y se apenan por la gente que está a su alrededor. Especialmente las almas trabajadoras de la luz, quienes tienen un profundo impulso a esparcir luz y conciencia sobre la Tierra, son muy sensibles al sufrimiento de los demás. Es difícil para ustedes ver el sufrimiento a escala global, por ejemplo, en regiones del mundo devastadas por la pobreza o por la guerra, o la destrucción y contaminación del medio ambiente. Pero cuando pasa a ser sufrimiento que está cerca de ustedes, en su ambiente personal, ustedes son afectados muy profundamente. Y es especialmente ahí que son desafiados a recuperar su poder.

Es importante comprender que ustedes no ayudan a alguien volviéndose más pequeños. Con frecuencia ustedes piensan que, si absorben y tragan parte de las emociones de la otra persona, se conectan profundamente con ellos y por lo tanto lo ayudan. Es como si estuvieran compartiendo la carga. Pero asimilando los problemas de la otra persona, su poder se fragmenta y se destroza por la negatividad en ellos. Ustedes pensarán que no tienen derecho a estar felices, tranquilos y satisfechos con ustedes mismos, mientras ellos están sufriendo. Este es un grave error. En realidad, lo opuesto es lo verdadero.

Ayudar verdaderamente a alguien significa que ustedes ponen su energía al servicio de la solución del problema, no en el problema mismo. Para hacer esto ustedes necesitan volverse más grandes en lugar de más pequeños. Más independencia y conciencia de uno mismo ustedes irradien, más representarán la “energía de la solución” y más podrán interesarse por alguien más sin agotarse. Si ustedes van a sufrir con ellos, ustedes realmente sólo estarán afirmando el problema. Si permanecen centrados y calmos, sin resonar con las emociones pesadas del otro, ustedes dan a conocer otro ángulo, otra forma de mirar el problema. Precisamente al no resonar con la energía del problema, ustedes vierten nueva luz sobre él.

La verdadera guía espiritual nunca involucra resolver el problema de alguien más. Más bien significa ser un faro de luz y de conciencia para ellos, quien les refleja sus problemas de un modo que les permite a ellos echar otra mirada sobre eso. Les permite a ellos ver significado y valor en el problema; les devuelve a ellos una sensación de libertad y de responsabilidad. Algo dentro de ustedes toca su corazón y los inspira: es la energía del amor. Es la energía de la aceptación. De este modo, ustedes les ofrecen a ellos la “energía de la solución”, no haciendo algo por ellos, sino irradiando esa paz hacia los demás. No se trata de llevar las cargas de los demás o de hallar soluciones a sus problemas. Se trata de llevar la energía de la solución en su propio ser y de compartirla abiertamente con los demás. Esa es la esencia de su misión en la Tierra, la esencia de lo que significa traer luz.

Ser fiel a ustedes mismos, cuidarse a ustedes mismos y escuchar lo que su intuición les dice es un prerrequisito para anclar la frecuencia del amor en la Tierra. Esto es lo que su alma quiere para ustedes. Cada vez que dejen que los demás arrebaten su energía, o den demasiado de ustedes por miedo o una necesidad de controlar, una parte de su luz se destroza y ustedes necesitarán recuperarse y sanarse emocionalmente para recuperar su equilibrio y vitalidad natural. Noten cómo esto sucede en su vida diaria. Si ustedes se están preocupando por otra persona, por cómo ellos los perciben a ustedes o por cómo ustedes deberían ayudarlos, y sus pensamientos van en círculos, y las mismas emociones se repiten, ustedes están atascados en el surco del miedo y del control. A menudo, ustedes tienden a entregar su energía porque piensan que están haciendo las cosas mejor, ayudando a las personas o resolviendo un problema. Pero presten atención: ¿realmente su contribución sirve a la solución del problema o lo afirma y por lo tanto perpetúa el problema? Pregúntense a ustedes mismos si no están realmente sirviendo a un ídolo, en lugar de servir a su propia luz interior.

Tratar de controlar las cosas con frecuencia parece apropiado y razonable, pero a menudo es sólo el miedo lo que los obliga. Con frecuencia se sienten cansados y agotados por todos sus esfuerzos en diferentes áreas de su vida, pero a menudo ustedes perseveran y sienten que están obligados a poner incluso más energía en eso. Ustedes piensan que le deben eso a alguien, a alguna organización, a la sociedad o incluso a Dios. Pero cada vez que ustedes se sienten emocionalmente agotados, insistiendo demasiado, es tiempo realmente de liberar y encontrar algún lugar tranquilo para ustedes mismos.  Es tiempo de soltar el mundo y volcarse hacia adentro. Cortar las sogas por un tiempo y reconectarse con su niño interior es muy importante para permanecer centrado y equilibrado. Al conectarse con el niño, también despiertan al ser angelical, el cuidador del niño. Ustedes se conectan con su “ser inferior” y su “ser superior” y al sentirlos dentro, y escucharlos cuidadosamente, ustedes comienzan a sentir cómo ellos pueden jugar juntos alegremente en su presencia. Se torna claro qué cosas necesitan hacer o perseguir para llegar a estar centrado y tranquilo otra vez.

Encontrar y seguir su pasión


Cada uno nace con una pasión. Imaginen que esa pasión es una hermosa rosa roja. Imaginen que, justo antes de nacer, ustedes están sentados en los confines del cielo, sosteniendo esta exquisita rosa roja en su mano. Aunque puedan estar dudando dar el salto dentro del reino de la Tierra, preguntándose incluso tristemente si realmente son capaces de cumplir con eso, ustedes sienten un profundo fuego interior, una pasión, la cual se presenta a ustedes como la rosa roja. Ahora imaginen que dan el salto, encarnan, y ahora llevan la rosa adentro, en su abdomen y en su corazón. Dejen que la energía de la rosa venga a ustedes ahora. Permitan que su pasión original, su inspiración se presente a ustedes en este momento.

Échenle una mirada a la rosa, ¿a qué se parece ahora? Tomen la primera imagen que aparece en su mente. ¿La rosa luce un poco triste y raída, o resplandece vibrantemente? ¿Ustedes ven un pimpollo o una rosa floreciente? ¿Necesita algo de ustedes en este momento? Tal vez más agua o luz del sol, o algo más de amor y atención, ¿o quiere ser trasladada a otro lugar, a un entorno donde se pueda nutrir más? Imaginen que le dan exactamente lo que necesita, y sientan cómo esto los afecta a ustedes en el nivel interior.

El rojo es el color de la Tierra y el del chakra raíz o base. El rojo es el color de la pasión. A menudo ustedes tienen miedo de su propia pasión. Ustedes temen dejar que este flujo original se exprese abiertamente en sus vidas, porque va en contra de lo que la sociedad o la tradición consideran apropiado, correcto y razonable. Sin embargo, en cada uno de ustedes hay una pasión original y una inspiración que es la verdadera fuente de su existencia aquí y ahora. Ustedes no pueden realmente sentirse realizados e inspirados hasta que no dejen que esa energía se esparza en su vida y la guíe. La esencia de la rendición como forma de vida es que ustedes se rinden a ustedes mismos, a su pasión del alma, a la inspiración que acuna su vida actual.

Hay varias formas de reconocer si ustedes están conectados con su pasión del alma.

1.  Sentir inspiración – donde sea que fluye, ahí es donde ustedes necesitan estar

La rendición como forma de vida significa que ustedes se dejan guiar por lo que verdaderamente los inspira. La rendición no es una energía pasiva. Al rendirse a lo que realmente los motiva y los inspira, ustedes abren la puerta a un flujo de energía interior vivaz y activo. Para descubrir ese flujo por ustedes mismos, necesitan descubrir con qué clase de ocupación o actividad su energía fluye naturalmente. ¿Qué cosas los hacen sentir felices y tranquilos? ¿En qué clase de ocupación o actividad ustedes sienten que las cosas se mueven fácilmente y con gracia? ¿Cuál es la esencia de estas cosas o actividades? Sientan la esencia de eso – y sepan que puede haber una variedad de caminos por los que esta esencia toma cuerpo y forma.

2.  Ser fiel a su propia naturaleza – lo que ustedes hacen naturalmente, es para lo que son buenos

Para reconocer su pasión ustedes necesitan darse cuenta de que siempre hay algo que es muy natural para ustedes. Es algo, una actividad, ocupación o forma de expresión, hacia la cual se sienten atraídos, se sienten interesados y a la cual disfrutan dedicarse. Es algo cercano y natural para ustedes, casi evidente desde su perspectiva. Para dar fruto a su talento natural ustedes pueden tener que aprender algunas habilidades o seguir alguna educación formal, pero será relativamente fácil y alegre para ustedes hacerlo. Su pasión es algo hacia lo cual sus habilidades y talentos están afinados; involucra actividades para las cuales son buenos desde el comienzo.

3.  Poner límites claros y atreverse a decir “no” – tómense a ustedes mismos seriamente

Ustedes están en el flujo de la rendición si se toman a ustedes mismos con la suficiente seriedad como para decir no a las cosas o personas que inhiben o interrumpen ese flujo. Sólo pueden seguir su pasión si se atreven a decir no a lo que no se adapta o se siente apropiado para ustedes. Rendirse a ustedes mismos, a su inspiración original, significa ser precoz y obstinado a veces, mantenerse apartado y confiar en los mensajes de su corazón incluso si la gente dice que ustedes son tontos o ridículos. Se trata de la fidelidad a ustedes mismos. ¡Atrévanse a ser grandes, atrévanse a marcar la diferencia! Realmente no hay alternativa, ustedes lo saben. La alternativa es que su flujo natural de inspiración se atasca y se seca y ustedes comienzan a sentirse frustrados, vacíos, enojados e insatisfechos. Si ustedes no eligen por ustedes mismos, eligen en contra de ustedes mismos. La energía de la rosa, su pasión, se retira y esto crea problemas psicológicos tales como soledad, desavenencia y finalmente depresión. Por lo tanto, atrévanse a decir no, atrévanse a ocupar un espacio con límites claros. No teman ser “egoísta” de acuerdo a los estándares de los falsos dioses.

4. Paciencia y ritmo – háganlo paso a paso

Si ustedes están conectados con la energía de su alma, con su inspiración, esto despejará un camino para ustedes en su vida diaria. Las oportunidades (en la forma de personas o situaciones que ustedes encuentran) vendrán hacia ustedes a un paso y ritmo que se adapta a ustedes. Si ustedes quieren estar a tono con ese flujo de manifestación, permanezcan en el presente y tómenlo paso a paso. No traten de correr más allá de todas las cosas que tienen que suceder para que comprendan sus sueños y su pasión. La vida los cuida a ustedes, ustedes no necesitan cuidar a la vida. Simplemente sientan su pasión y confíenla a las manos del Dios dentro de ustedes. Dejen que el ángel que está adentro proteja y vigile los sueños y deseos de su niño interior. ¡Ríndanse y confíen!

Muchas gracias por estar aquí hoy. Es un gran placer estar con ustedes y recuerden que el yo que está diciendo esto también representa en gran medida su propia energía. Es su propia energía la que les hace señas y los invita: atrévanse a vivir, ¡atrévanse a ser quienes son!

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© Pamela Kribbe 2005
Traducción: Sandra Gusella